El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, anunció este martes que la «simplificación» y las «mejoras» en la tramitación del Ingreso Mínimo Vital (IMV) provocarán un «acelerón muy fuerte en la segunda parte de septiembre», por el que 150.000 hogares, unas 450.000 personas, podrán percibir la prestación.
También pidió «paciencia» ante el «gran volumen de expedientes tramitados» y dijo que desde su departamento eran conscientes de la «complejidad». Sin embargo, anunció que están trabajando para que este proceso «sea lo más sencillo».
En este sentido, explicó que la tramitación del IMV se va a simplificar. Escrivá afirmó que el requisito de que las personas solicitantes de la prestación estén buscando de forma activa empleo va a cambiar. «En lugar de la solicitud de la confirmación de que están apuntadas al paro, lo que vamos a hacer, a partir de ahora, es que esto se convierta en una obligación a posteriori y que sustancien este requisito en X meses posteriores. Esto es una simplificación», aclaró en una entrevista en «Hora 25» en la Cadena Ser.
Escrivá recalcó que con estas mejoras, en las que están «aprendiendo y mejorando» en los cruces de datos con las administraciones, habrá un «acelerón muy fuerte en la segunda parte de septiembre», con el que 150.000 hogares podrán recibir el ingreso mínimo.
Hasta el momento, unas 85.000 familias en España ya están recibiendo el IMV aprobado por el Gobierno el pasado mes de mayo con el objetivo de reducir en un 80% la pobreza extrema, y unos 900.000 expedientes se están tramitando en la Seguridad Social.
El ministro también subrayó que los ciudadanos que tengan derecho a la prestación y la presenten antes de final de diciembre, y a los que todavía no se les ha concedido, recibirán «retroactivamente sus nominas mensuales desde junio en el momento en el que se le concedan». Por último, pidió a la población que no presenten por duplicado las solicitudes, porque eso atasca el procedimiento.
Responde a Iglesias
Escrivá respondió al vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, que la «rapidez» en la tramitación de las solicitudes del IMV puede frustrar «expectativas» porque «a veces uno quiere correr, y cuando va muy deprisa, tropieza y tiene que esperar mucho más».
Iglesias apuntó este martes la importancia de agilizar la tramitación de las solicitudes del IMV, dependientes igualmente del departamento que gestiona Escrivá, ante los retrasos acumulados, a los que se refirió como «problema». «Tenemos la obligación de que, si hemos aprobado un derecho que tiene carácter retroactivo, no se pueden poner excusas, tenemos que correr», afirmó el vicepresidente segundo del Gobierno.
El ministro enmarcó la tramitación de las solicitudes «en los procedimientos administrativos existentes y que no pueden alterarse». Así, explicó que una de las estrategia que se planteó antes de aprobar el ingreso mínimo para acelerar las solicitudes era pedir «una declaración responsable». «Pero eso requiere una verificación posterior», explicó Escrivá, quien dijo que esa opción frustraría expectativas a ciudadanos vulnerables. «A veces uno quiere correr y cuando va muy deprisa, tropieza y tiene que esperar mucho más», sentenció.
Por ello, declaró que dada la «avalancha de peticiones» ante una «prestación nueva», ir por la vía rápida de la declaración responsable habría provocado pedir «el reintegro» a muchos solicitantes. «Y el atasco administrativo sería mayor«, incidió.