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Es habitual que a las personas que tienen familiares dependientes les surjan dudas relacionadas con la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las Personas en Situación de Dependencia.
Es por eso por lo que en este artículo vamos a adentrarnos de forma breve en esta Ley, con el fin de que familiares de personas dependientes o trabajadores puedan recurrir a esta guía.
¿Qué es la Ley de Dependencia?
La ley de dependencia se aplica a aquellas personas que por razones de edad, enfermedad o discapacidad son dependientes de forma permanente; la persona en cuestión no dispone de autonomía física, mental o sensorial. De modo que precisan de una o varias personas para realizar las actividades de la vida diaria.
Esta ley de dependencia fue creada para el Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD) la cual engloba todos los servicios y prestaciones económicas reservadas para suscitar la autonomía personal. Además, ayuda a la protección y cuidado de aquellas personas en estado de dependencia a través de los diferentes servicios, tanto públicos como privados en España, los cuales deben ser acreditados para tal fin.
¿Qué es dependencia y qué es autonomía según la Ley de Dependencia?
En el artículo 2 de la ley de dependencia se definen claramente los conceptos de la autonomía y la dependencia:
- Autonomía: capacidad de que tienen las personas, sin importar la edad, para tomar sus propias decisiones, además de controlar y afrontar la manera correcta de vivir en sociedad.
- Dependencia: estado de carácter permanente en que se encuentran las personas que, por razones derivadas de la edad, la enfermedad o la discapacidad, precisan de la atención de otra persona o de ayudas importantes para realizar actividades básicas de la vida diaria.
- Actividades Básicas de la Vida Diaria (ABVD): son todas aquellas actividades que puede realizar una persona con autonomía como la higiene personal, labores domésticas, movilidad, orientación y reconocimiento de personas y objetos, así como entender con facilidad las instrucciones para poder ejecutarlas.
¿Cómo solicitar el reconocimiento de la situación de dependencia?
El procedimiento para el reconocimiento de la situación de dependencia se iniciará a instancia de los ciudadanos siempre que se considere que el solicitante es dependiente en los términos que describe la Ley.
Puede solicitarse en primera persona o a través de representante legal. A continuación, vamos a ver los pasos que tienes que seguir para comenzar el procedimiento:
- Recabar la información e impresos necesarios a través de los Servicios Sociales más próximos al domicilio.
- Solicitud, en modelo normalizado, dirigida a la Dirección General de Atención a la Dependencia.
- Entregar la solicitud y toda la documentación que sea necesaria para el reconocimiento en:
- Centro de Servicios Sociales Municipales próximo a su domicilio.
- En cualquier Registro oficial.
¿Qué documento se debe aportar a la solicitud?
Vamos a detallar de forma general qué documentación hay que presentar junto con la solicitud, ya que, de forma específica, cada Comunidad Autónoma exige ampliar ciertos documentos.
Documentación obligatoria:
- Fotocopia compulsada del DNI/NIE en vigor del solicitante.
- Certificado de Empadronamiento que deberá justificar el domicilio actual, así como 5 años de permanencia en España, los cuales los 2 últimos sean inmediatamente anteriores a la fecha de la solicitud.
- Informe de Salud emitido por un médico colegiado.
Documentación si se solicita con representante legal:
- Fotocopia del DNI/NIE del representante legal o Guardador de Hecho.
- Si se trata de representante legal, aportar Sentencia judicial de incapacidad con nombramiento de representante legal.
- Declaración del Guardador de Hecho.
Datos a aportar sobre la situación de dependencia:
- Original y fotocopia de la resolución del reconocimiento del grado de minusvalía.
- Original y fotocopia de la resolución del reconocimiento de la Gran Invalidez.
Requisitos para solicitar el reconocimiento de la situación de dependencia
Los requisitos son los siguientes:
- Tener nacionalidad española.
- Encontrarse en situación de dependencia en alguno de los grados establecidos por la Ley.
- Vivir en España y haberlo hecho durante 5 años. De estos, dos deberán ser inmediatamente anteriores a la fecha de la presentación de la solicitud.
Valoración del grado y nivel de dependencia
Pues bien, el grado y nivel de dependencia se determina mediante la aplicación del baremo establecido por el Consejo Territorial del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia.
Grados y niveles dependencia:
- Grado I: dependencia moderada
- Grado II: dependencia severa
- Grado III: gran dependencia
Grado I: dependencia moderada
La persona necesita ayuda para realizar alguna actividad básica de la vida diaria al menos una vez al día o tiene necesidades de apoyo intermitente o limitado para su autonomía personal.
Grado II: dependencia severa
En este caso, la persona necesita apoyo para lograr ejecutar varias actividades de la vida diaria dos o tres veces al día. Pero, no necesita tener un apoyo permanente para su autonomía personal.
Grado III: gran dependencia
Se produce cuando la persona necesita ayuda para poder realizar varias veces al día las actividades básicas diarias, ya que ha perdido totalmente su autonomía, bien sea física, mental, intelectual o sensorial, y se hace indispensable el apoyo constante de otra persona, o tal vez necesita del apoyo extendido para su autonomía personal.