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El Observatorio Español de Racismo y Xenofobia (OBERAXE) participa desde 2017 en los ejercicios de monitorización, es decir de seguimiento, del «Código de conducta para la lucha contra la incitación al odio en Internet» que fue firmado por la Comisión Europea y las principales empresas prestadoras de servicios de alojamiento de datos (YouTube, Facebook, Twitter y Microsoft) en 2016.
El discurso del odio
El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones a través de OBERAXE ha publicado los resultados de la monitorización del discurso de odio en línea realizada durante los meses de mayo y junio de 2021. Su objetivo ha sido analizar y recoger el contenido dirigido hacia la población inmigrante para poder poner cifras al discurso de odio detectado en internet.
Los datos del informe son bastante preocupantes pues entre el 1 de mayo y el 30 de junio de 2021, OBERAXE realizó un total de 557 comunicaciones de discurso de odio a las plataformas, lo que supone un incremento del 18,3% con respecto a los meses de marzo y abril y del 44,6% desde enero y febrero. Del total de comunicaciones, 301 contenidos fueron eliminados por las plataformas, un 54%.
En la agenda política
La agenda mediática y política volvió a ser determinante en el desarrollo e incidencia del discurso de odio hacia ciertos colectivos.
Como no podía ser de otra manera, no puede sorprendernos que los contenidos de odio aumenten cuando vemos discursos de este calibre por parte de partidos políticos. Que son ejemplo a seguir por un gran porcentaje de la población, sin ningún tipo de consecuencia. Incluso llegando a tener la justicia de su lado permitiendo utilizar eslóganes electorales basados en mentiras que avivan más el fuego del racismo y la xenofobia.
No todo vale
Estamos en un momento social en el que nos hemos llegado a creer que todo vale a través de una pantalla, que podemos escribir sin ningún tipo de consecuencia lo primero que se nos pase por la cabeza en redes sociales.
Vivimos en un momento en el que parece que hemos olvidado cualquier tipo de código ético y nos creemos con el derecho de opinar desde la superioridad moral. Muchas veces entendida por el hecho de pertenecer a una raza o tener cierta nacionalidad. Por desgracia, existe un porcentaje de la sociedad que cada día pierde un poco más su humanidad desatando su odio en las plataformas digitales, empeñándose en ver enemigos/as donde solo hay personas, intentado convencerse de que son delincuentes y no simplemente niños/as.
Una buena herramienta
Las plataformas online, como las redes sociales, pueden ser una herramienta estupenda siempre y cuando se utilicen de manera correcta. Pero realmente ¿hemos aprendido a utilizarlas o nos hemos lanzado de cabeza sin saber si había agua en la piscina?.
La sociedad tecnológica ha avanzado a un ritmo tan rápido que no nos ha dado tiempo a asentar las bases necesarias para un aprovechamiento responsable, enriquecedor y saludable de este canal. Aunque, por suerte, también existe un gran porcentaje de personas que las usa con pensamiento crítico y con grandes fines, como combatir el odio, el miedo y la ignorancia.
Cuando leo boletines como el que hoy hemos expuesto, siempre me pregunto lo mismo: ¿Cuándo entenderemos que la base de todo está en la educación? Este mundo necesita menos odio y más educación social para una sociedad más comprensiva y comprometida.