En un momento en el que en el mercado laboral reina la incertidumbre, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ha puesto en marcha una nueva ayuda que está destinada a personas desempleadas con edades comprendidas entre los 30 y los 55 años. Esta medida quiere reforzar la red de protección social existente para aquellas personas que han agotado la prestación contributiva por desempleo, que podrán optar a 570 euros mensuales incluso sin la necesidad de tener cargas familiares.
Estamos ante un subsidio que supone un avance importante en la política de protección social y se pretende apoyar de forma más efectiva a aquellas personas que se encuentran en búsqueda activa de empleo, pero carecen de otros recursos económicos suficientes.
Unas condiciones esenciales
Este subsidio está dirigido a aquellos trabajadores que, después de haber agotado el paro, no podían acceder a ninguna ayuda por no tener cargas familiares o por no cumplir con ciertos requisitos. Las personas desempleadas con edades comprendidas entre 30 y 55 años podrán optar a esta ayuda siempre que cumplan con algunas condiciones, entre las que se encuentran la de estar inscritas como demandantes de empleo y no superar ciertos umbrales de ingresos mensuales.
Uno de los cambios más relevantes es la eliminación del requisito de esperar un mes después de agotar el paro para poder solicitar este subsidio. Ahora se podrá hacer desde el día siguiente y se ha simplificado el criterio de renta: sólo se tienen en cuenta los ingresos individuales, sin considerar los del resto de convivientes o familiares. Esto quiere decir que una persona sin ingresos propios podrá solicitar esta ayuda aunque conviva con otros miembros de la familia que sí los generen.
Es importante tener en cuenta que, a diferencia de otros subsidios, esta ayuda del SEPE contempla una cantidad variable. Durante los primeros seis meses, el importe mensual es de 570 euros; a partir del séptimo mes y hasta el duodécimo, baja a los 540 euros, y desde el decimotercero en adelante queda fijada en 480 euros.
Requisitos para obtener el subsidio del SEPE
Pese a la flexibilización de varios criterios, hay algunos requisitos clave que se deben cumplir. En primer lugar, es indispensable estar en situación de desempleo, inscrito en el SEPE como demandante activo de empleo y haber agotado previamente la prestación contributiva. Además, los ingresos personales no deben superar el 75% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), lo que equivale en la actualidad a unos 810 euros al mes.
En ciertos casos también se exige un historial mínimo de cotización. Se debe haber trabajado durante al menos 15 años, de los que dos deben haberse registrado dentro de los últimos 15. Sin embargo, estos requisitos pueden variar en función del perfil del solicitante, ya que el SEPE ha previsto ciertos colectivos prioritarios a la hora de otorgar esta ayuda.
Perfiles con prioridad y compatibilidades laborales
El nuevo subsidio pone especial atención en varios grupos vulnerables dentro del colectivo de desempleados. Entre ello se encuentras las personas menores de 45 años sin cargas familiares, aquellas que tradicionalmente se quedaban fuera de la mayoría de las ayudas; las víctimas de violencia de género; los trabajadores del colectivo agrario y aquellas personas que han regresado a España después de trabajar en el extranjero.
Una novedad muy importante es la posibilidad de compatibilizar esta ayuda con un empelo durante un periodo máximo de 180 días, gracias a lo que se denomina Complemento de Apoyo al Empleo (CAE). Esto permite a los beneficiarios poder aceptar contratos temporales o a tiempo parcial sin perder de forma automática el subsidio. También se permite la compatibilidad con becas de formación profesional.