A estas alturas, no hay muchas personas en España que no hayan pasado alguna vez por un pasillo de Mercadona, ya que hacer la compra semanal en este supermercado se ha convertido en rutina para muchos y en casi una extensión de nuestro despensa y nuestro hogar. Pero esa sensación de familiaridad y esos productos que ya no parecen ser tan de marca blanca como al principio de su existencia tienen una razón de ser, hay una estrategia detrás de cada detalle de esta cadena de supermercados que nos hace comprar más productos de los que teníamos en mente.
Juan Roig, presidente y principal rostro visible de la cadena, siempre ha tenido clara una máxima: el cliente es el jefe. Y, como buen jefe, hay que saber cómo guiarlo para que compre, repita y, si es posible, se lleve alguna cosa más de la que venía buscando, y justo de eso va este artículo: de cómo Mercadona ha perfeccionado el arte de hacer que nuestro ticket de la compra sea más largo.
Todas las estrategias que Mercadona ha puesto en práctica en sus supermercados
Una de las estrategias que más se han dado a conocer en los últimos meses tiene que ver con el tipo de carrito que usamos al hacer la compra, los cuales son muy diferentes a los ya no tan comunes carritos bajos de tipo cesta con ruedas, los cuales podías llevar sin mucho esfuerzo. Pero quizás no te has dado cuenta que cada vez es más difícil ver estos objetos en supermercados ya no solo de Mercadona, sino en general, algo que ya te adelantamos que no es una casualidad.
Tal y como explica Antonio Sánchez, técnico de marketing, en un hilo de Threads, Mercadona ha comenzado a retirar estos carritos pequeños para sustituirlos por otros de mayor tamaño, lo cual se debe a una cuestión de percepción. Es decir, que si vemos que nuestro carro grande tiene muy pocas cosas dentro, nuestro cerebro va a interpretar esto como que nuestra compra es pobre o insuficiente o que seguro que nos ha olvidado algo, por lo que nos damos otra vuelta por el supermercado y echamos más productos.
Esto se parece a la nueva estrategia que tiene relacionada con los platos ya cocinados, sección que es una de las que más éxito tiene últimamente. Tanto, que hasta hay supermercados de Mercadona que ya cuentan con su propia cafetería o comedor para que ni siquiera tengamos que esperar a llegar a nuestra casa para disfrutarlos. Esto se da porque la marca pretende hacernos ver que nos facilita la vida y nosotros, al percibirlo así, nos convertimos en clientes fieles.
Mercadona y su forma de anticiparse a lo que queremos (aunque no lo sepamos)
Otro de los grandes aciertos de Mercadona ha sido entender qué tipo de producto puede generar deseo en sus consumidores, entrando ahí en juego su marca blanca, Hacendado, que hace tiempo dejó de ser simplemente una alternativa más económica para convertirse en la elección principal de muchos. No es raro que alguien elija un hummus, unas patatas o una pizza de Mercadona antes que una de marca conocida, algo que se ha conseguido a base de cuidar el sabor, el precio y la imagen.
Y no podemos olvidar su sección de perfumería y maquillaje, ya que hay quien entra a Mercadona solo para comprar cosméticos y cremas de la marca propia llamada Deliplus, los cuales quizás no tienen la misma calidad que un producto de farmacia pero que cuentan con un precio que hace difícil la competencia, no en vano las redes sociales se llenan de vez en cuando de cosméticos de este supermercado.