Esto es lo que nunca debes hacer en un control policial: lo confirma un abogado

Hay personas que no afrontan de la mejor manera el hecho de tener que pasar un control de alcoholemia y drogas. Por la circunstancia que sea, en ocasiones las situación se complica incluso cuando no se ha cometido ninguna ilegalidad. Son varios los expertos que dan sus consejos de cómo actuar para evitar problemas y una de las cosas que se dicen que nunca se debe hacer “es negarse a soplar”, algo que parece que no entra en la cabeza de muchos que son parados en un control de tráfico.

La recomendación está fundada y es que “en vez de cometer sólo un delito” en el caso de estar bajo los efectos del alcohol, si se hubiese consumido, se cometerán dos: “Uno por la negativa y otro por la conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas”.  Y esto supone que lo que podría ser una sanción con retirada de carnet de ocho meses, se convierta “en el doble”. Por tanto, si paran en un control “sopla”.

Otro consejo que puede venir bien en los controles policiales

La actitud con la que afrontar el control, ya sea rutinario o de alcohol y otras sustancias, es clave para salir con el menor número de problemas posible. Y ahora que llega un periodo de muchos desplazamientos, con muchos controles de tráfico, hay que saber actuar si nos paran. Muchos conductores derivan a un estado de nervios importante y su comportamiento dista mucho del que pueden tener en una situación normal, cayendo en fallos que le pueden pasar factura aunque no hayan cometido ningún delito.

Hay que estar atento a la siguiente pregunta que suele hacer un agente de la Guardia Civil en un control de tráfico: “¿Sabe usted el motivo por el que se la ha parado?”. Se trata de una cuestión muy sencilla y que tiene como objetivo intentar averiguar si se ha incurrido en algún tipo de delito antes de ser parados en el control. Si se reconoce que hubo una infracción, se estaría admitiendo ante el agente las razones por las que se le ha parado.

Es una situación que se repite tanto, que expertos abogados hablan de ella en diferentes foros, tanto dentro como fuera de nuestro país. Y todos coinciden en que si un agente pregunta si se sabe el motivo por que se nos ha parado lo que se debe responder es con un “no sé” o un “no tengo ni idea”, siendo otras opciones “prefiero no decirlo” o con un tajante “no”.

Una vez dada esta respuesta, seguro que el agente sigue insistiendo en su objetivo. Es aquí cuando en España un conductor puede hacer valer su derecho a no declarar contra sí mismo, tal y como está recogido en la Constitución Española en el artículo 24. Este artículo estable el derecho de una persona a no declarar en contra de sus intereses y de no confesarse culpable. De esta manera se busca garantizar la presunción de inocencia y que la confesión sea siempre libre y voluntaria, sin ningún tipo de coacción por parte del agente.

Estos consejos son buenos para saber cómo actuar ante posibles situaciones en las que una persona se pueda ver en vuelta con los agentes de tráfico. Pero lo primero que debe quedar claro es que estos están haciendo su trabajo y su objetivo es mantener la seguridad dentro de la red de carreteras de nuestro país, sacar de las mismas a todos aquellos que la ponen en peligro. Por tanto, merecen una conversación desde la educación y el respeto. Al igual que ellos lo deben tener por aquellas personas que están al volante y puede que ante un control de tráfico se pongan nerviosas sin haber hecho nada malo.