Si el apagón te ha dejado algún electrodoméstico estropeado, has perdido alimentos de tu nevera o has sufrido interrupciones en tus actividades del día a día, debes saber que puedes reclamar, tal y como se muestra en la ley que ampara a los consumidores ante los daños que pueda causar un apagón, y aunque los trámites puedan parecer algo complejos, en realidad seguir unos sencillos pasos puede hacer que recuperes parte de lo perdido.
El apagón que ha afectado a gran parte del país ha generado una pregunta general muy importante: ¿cómo reclamar daños a las compañías eléctricas? Tanto si se trata de electrodomésticos que han dejado de funcionar como de alimentos estropeados o pérdidas en compras online, la normativa permite reclamar una compensación siempre que podamos justificar el daño y sigamos el procedimiento correcto.
Qué puedes reclamar si has sufrido daños por un apagón
Lo primero que debes tener en cuenta es que las compañías eléctricas están obligadas a dar un servicio de calidad, por lo que cuando se habla de un apagón sorpresivo, es decir, que no ha sido algo programado, y este provoca daños en los hogares, se les podrá reclamar a estas por parte de los consumidores. Esto se aplica a si dicho apagón ha dañado los electrodomésticos o si se han perdido los alimentos que teníamos almacenados en la nevera por esta causa, lo que obviamente genera unas perdidas económicas en las personas que los han padecido.
Debemos saber que esto no siempre puede aplicarse (aunque en este caso sí), ya que si se tratase de un apagón debido a trabajos de mantenimiento avisados con al menos de 24 horas de antelación, no habría derecho a indemnización.
En el caso de que hayamos sufrido daños materiales, es muy importante la parte en la que documentemos todo, es decir, que hagamos fotografías, que encontremos la factura del bien que ha sido dañado o informes técnicos en los que se haya revisado el bien y se concluya que se debe al apagón que hemos sufrido.
Los pasos a seguir para reclamar los daños del apagón
El procedimiento para reclamar por los efectos de un apagón es más sencillo de lo que parece si seguimos una serie de pasos, siendo el primero de ellos el enviar un escrito al servicio de atención al cliente de la compañía distribuidora que aparece en nuestra factura. Este escrito debe ir acompañado de toda la documentación que acredite el daño causado por el apagón y que ya hemos mencionado.
En caso de que no se obtenga respuesta o esta sea negativa, el siguiente paso es acudir a la Oficina de Información al Consumidor de nuestra comunidad o presentar la reclamación a través de internet. De forma paralela, también puede acudirse al organismo autonómico competente en materia de energía, que podrá verificar si el apagón se produjo por causas atribuibles a la compañía.
También debemos revisar muy bien la póliza de seguro de hogar que tengamos (si es que nuestra casa cuenta con un seguro), ya que en ella muchas veces podremos encontrar apartados en los que se cubre la pérdida de alimentos debido a una avería del frigorífico u otros daños sufridos en los electrodomésticos.
Otras cuestiones a las que debemos prestar atención
Si en el momento del corte estabas realizando una compra online, reservando un vuelo o finalizando una operación bancaria, es muy importante revisar tanto tu correo electrónico como tu cuenta bancaria para comprobar si la transacción se ha completado correctamente.
Según recuerda el Real Decreto que regula la calidad del suministro eléctrico, los distribuidores son responsables de garantizar el servicio, aunque en ciertos casos, si demuestran que el apagón fue culpa de terceros, podrían derivar la responsabilidad. En cualquier caso, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) tiene la última palabra a la hora de determinar a quién corresponde la responsabilidad si surgen discrepancias.