Confirmado: la luz será más cara a partir de este mes para estas personas por decisión del Gobierno

Los usuarios del bono social eléctrico verán como pagarán más de lo que lo han hecho en los últimos meses en su factura de la luz. El motivo, porque la rebaja realizada por parte del Gobierno con la que contaban en función de su grado de vulnerabilidad se verá reducida desde este mes de julio: pasará del 50% al 42,2% para los consumidores considerados vulnerables, y del 65% al 57,75% en el caso de los vulnerables severos.

Hay que recordar que en 2022, con motivo de la crisis derivada de la Guerra de Ucrania, el Gobierno de Pedro Sánchez aprobó una serie de medidas que estuvieron vigentes hasta el pasado 31 de diciembre. Las mismas estaban destinadas a aliviar el gasto energético de empresas y hogares. Una de ellas consistía en ampliar las ayudas al bono social eléctrico, para, de forma progresiva, ir reduciéndolas conforme a un calendario establecido de antemano.

Se reducen las ayudas a la factura de la luz

El esquema de implementación de esta medida del bono social eléctrico destinado a pagar menos por electricidad contemplaba una reducción de la factura de la luz del 50% para los consumidores vulnerables y del 65% para los vulnerables severos desde el 1 de enero hasta el 1 de julio de este 2025. Este es el único motivo por el que los porcentajes de rebaja se reducen ahora (35% y 50%) y volverán a hacerlo el próximo 1 de enero de 2026, asta llegar a la situación en la que estaban antes del estadillo de la crisis (25% y 40%).

Aunque es un paso hacia la normalización, será gasto importante a asumir por muchas familias cuya situación económica no es ideal y la rebaja de estas ayudas se traduce en un nuevo obstáculo para mantener el equilibrio financiero.

30 euros hasta diciembre más para las familias más vulnerables

Para aquellos consumidores que está catalogados como vulnerables severos, la reducción de la ayuda supone una pérdida de 1,71 euros al mes a la hora de pagar la factura de la luz si se toma como referencia el precio actual del PVPC. Esto significa que cada hogar perderá unos 30 euros en ayudas de aquí a diciembre.

A pesar de que la cifra pueda parecer reducida, su impacto se multiplica en aquellos hogares con ingresos limitados y gastos fijos elevados.

Madrid y Barcelona, las ciudades más afectadas por la decisión

Las dos ciudades más grandes de España, Madrid y Barcelona, son las que concentran el mayor número de beneficiarios del bono social eléctrico, con 184.527 y 127.601 usuarios respectivamente. Sin embargo, su incidencia en cuanto a la población total está muy por debajo de otras regiones más empobrecidas. En Madrid, por ejemplo, sólo hay 25,4 usuarios por cada 1.000 habitantes y en Barcelona 21,4.

Este contraste deja claro cómo, a pesar de la concentración urbana, las necesidades energéticas más urgentes se encuentran en zonas que están menos densamente pobladas, en las que la pobreza tiene un carácter más estructural y menos visible. Es por esto que comunidades con mayores niveles de renta, como País Vasco, Navarro o buena parte de Cataluña, presentan una incidencia muy baja del bono social, lo que refuerza la idea de su papel redistributivo.

En la actualidad, más del 22% de la población española desconoce la existencia del bono social eléctrico para pagar menos en la factura de la luz. Esto implica que una parte considerable de los potenciales beneficiarios no accede a este ayuda porque carece de la información necesaria o por las barreras burocráticas que existen para obtenerlas.