Adiós a la privacidad: expertos en tecnología alertan de que las llamadas telefónicas pueden ser espiadas de esta manera

Muchas veces pensamos que lo más seguro son las llamadas telefónicas, ya que nos dan la sensación de que son completamente privadas y que no pueden ser “hackeadas”, algo que sí que pasa más fácilmente con nuestros mensajes a través de WhatsApp o cualquier otra aplicación de mensajería instantánea. Pero, recientemente, se ha podido comprobar que esto no es así gracias a investigadores de la Universidad Estatal de Pensilvania, los cuales han demostrado que nuestras conversaciones pueden ser espiadas a distancia debido a un detalle que pocos conocen y que es algo que emite nuestro propio dispositivo.

Nos referimos, nada más y nada menos, que a las microvibraciones generadas al transmitir la voz; las cuales, mediante una técnica que las combina con la inteligencia artificial, nos permiten reconstruir palabras y frases sin que el usuario lo perciba, convirtiéndose en una muy amenaza real para nuestra privacidad.

Esto quiere decir que no hace falta que un intruso tenga acceso físico al teléfono, ya solo con el equipamiento adecuado, esas vibraciones podrían captarse desde unos metros y traducirse en texto comprensible. Aunque todavía se requiere de conocimientos técnicos avanzados y hardware especializado, el hallazgo evidencia que ninguna conversación telefónica está completamente a salvo y anticipa un escenario en el que nuestras llamadas telefónicas podrían dejar de ser privadas más pronto de lo que imaginamos.

Cómo las llamadas telefónicas pueden ser espiadas a través de microvibraciones

La verdad es que el procedimiento por el cual se convierte una conversación en algo que puede ser espiado es bastante sutil, ya que durante una llamada telefónica, el altavoz y el micrófono generan microvibraciones que recorren la carcasa del móvil, las cuales pueden ser detectadas mediante radares de ondas milimétricas, aunque a nosotros nos resulten prácticamente imperceptibles. En los experimentos realizados por la Universidad Estatal de Pensilvania, los investigares a cargo de la misma colocaron sensores a poco metros del teléfono empleado y, usando posteriormente inteligencia artificial, pudieron transcribir fragmentos de la conversación que se estaba llevando a cabo en ese momento.

Para este análisis se empleó una versión modificada de ‘Whisper’, un modelo de reconocimiento de voz de código abierto y, aunque la precisión inicial fue del 60 %, los expertos destacan que puede mejorar significativamente si se combinan los datos con contexto previo o conocimiento parcial de la conversación. Esto significa que, incluso sin acceso directo al teléfono, un ciberdelincuente podría reconstruir parte de las llamadas telefónicas y extraer información sensible como datos bancarios, contraseñas o detalles personales.

Riesgos crecientes y medidas de protección para tus llamadas telefónicas

Este estudio fue presentado en la conferencia de ciberseguridad ACM WiSec 2025 y, aunque por el momento esta técnica no está al alcance de cualquier persona, sí demuestra que la tecnología necesaria para espiar las llamadas telefónicas ya está disponible y probablemente en unos años sea más accesible gracias a los avances futuros en estos campos. Esto es bastante preocupante, sobre todo si tenemos en cuenta que compartimos muchos datos mediante mensajes de voz o a través de llamadas, siendo un riesgo muy real y palpable para nuestra seguridad y privacidad.

El autor principal del estudio, Suryoday Basak, compara esta técnica con la lectura de labios, en la cual muchas veces no se obtiene una transcripción exacta, pero la cual combinada con saber algunos de los fragmentos de la conversación y con el contexto de la misma, sí que nos permite reconstruir gran parte de la misma y entender qué se está diciendo. En este punto nos encontramos con la ayuda de la inteligencia artificial, lo cual genera la paradoja de que en muchos casos, esta se emplea en ciberseguridad, pero también puede ayudar a perfeccionar ciertas técnicas de espionaje.

El problema con las llamadas telefónicas está expuesto, pero los investigadores también han dado unas indicaciones para solucionarlo, las cuales pasan por rediseñar los dispositivos para reducir las vibraciones externas, utilizar encriptación de extremo a extremo con redundancia de señal y desarrollar interferencias controladas que impidan la captura de datos por radar.