Parece que el mundo de las estafas no para, y es que la Policía Nacional ya ha lanzado un aviso bastante alarmante, ya que una de ellas está empezando a utilizar tu propia cara para extorsionarte, algo que hasta ahora parecía casi de película de ciencia ficción. Para poder evitarla, debes tener en cuenta dos aspectos muy importantes, siendo el primero de ellos la protección de la privacidad de tus fotos en redes sociales y el segundo es que si recibes una amenaza con un vídeo falso, no cedas al chantaje, sino que haz capturas de todo, guárdalo y empléalo para ir inmediatamente a la Policía Nacional a interponer una denuncia.
¿Por qué funciona y por qué no debes pagar? Porque los delincuentes buscan tu miedo, no tu dinero. Si tienen un montaje, su intención es que pagues para que no lo publiquen, por lo que la mejor defensa es no intervenir en negociaciones privadas, ya que cualquier pago no garantiza nada y suele financiar otra estafa. Denunciar de la forma más rápida que nos sea posible y dejar que los investigadores actúen es la forma más segura de cortar la cadena de esta estafa, lo cual te ayudará a ti mismo pero también a todos los que puedan venir detrás.
Cómo funciona esta estafa y por qué es peligrosa
La técnica es sencilla y, al mismo tiempo, inquietante, ya que con herramientas de inteligencia artificial los estafadores pueden crear vídeos falsos, los conocidos como deepfakes, que muestran a una persona confesando un delito o realizando actos que nunca cometió. Bastan fotos públicas de redes como Facebook o Instagram para entrenar el algoritmo y, una vez confeccionado el material, la estafa evoluciona hacia el chantaje, ya que te contactan por teléfono, mensaje o correo y piden dinero a cambio de no difundir el montaje.
Esta estafa se apoya en dos armas, y son la facilidad técnica y el terror psicológico. Lo que la hace especialmente perniciosa es que a ojos de familiares o amigos el vídeo puede parecer real, ahí radica la presión que el estafador busca; pero recuerda, la verosimilitud visual no equivale a veracidad. Las herramientas forenses y la investigación policial suelen poder demostrar la falsedad del material, por lo que alertar a las autoridades es la mejor respuesta ante la estafa.
Cómo protegerte antes de que te afecte la estafa
Como siempre se dice en estos casos, la prevención es la mejor arma de todas, por lo que lo primero que debes hacer para no caer en una estafa como esta es la de reducir la visibilidad de los perfiles que tengas en redes sociales y en internet en general, para lo cual puedes configurar la privacidad para que solo los contactos vean tus fotografías. Además, si subes una imagen en la que salgas, evita hacerlo en alta resolución y sin que se muestre tu cara desde varios ángulos, ya que esto dificultará que los ciberdelincuentes tengan lo suficiente para crear una imagen que de algún modo resulte real.
Otro punto a tener en cuenta es el de no aceptar solicitudes de amistad de perfiles que parezcan sospechosos o de los que no sepamos nada, algo que podemos comprobar en los contactos en común que tengamos con quien enviar dicha solicitud.
Si te llega un vídeo o una amenaza, lo que debes hacer (y que ya te hemos avisado incluso al principio del artículo) es no pagar, ni respondas emocionado y guarda todas las pruebas (mensajes, correos, audios). Haz capturas y respáldalas en varios lugares, después de lo cual debes denunciar cuanto antes a la Policía Nacional y presentarles la información; ya que ellos saben cómo manejar casos de suplantación de identidad y chantaje digital. También es buena idea informar a familiares y amigos para parar o bloquear la difusión del contenido falso y cortar la fuerza del chantaje, además de que así ellos también estén prevenidos si les llegase a pasar.