Una de las grandes ventajas competitivas que tienen las cadenas de distribución que operan en España, como por ejemplo Aldi, Dia, Mercadona o Lidl es su marca blanca, la propia. Esta está en auge como consecuencia de la inflación y el aumento de los costes de las materias primas, que obliga a subir los precios de los productos en el lineal. Las familias españolas, según diversos estudios, apuestan por la marca propia por su buena relación calidad-precio. A pesar de costar menos, la cantidad se mantiene y esto es una de las cosas más importantes para los consumidores.
En lo que se lleva de año, la marca propia ha crecido 1,7 puntos, un ritmo muy parecido al de 2024. Aunque se observa una pequeña desaceleración, en el acumulado hasta agosto su cuota ya alcanza el 45,9%. Este crecimiento se debe, en gran medida, a una evolución de las cadenas de surtido como como es Mercadona.
Un informe realizado por Aldi, se concluye que “en 2025 más de la mitad del volumen de compra de los hogares ya corresponde a productos de marca propia con un 53%. Las familias compran productos de marca propia de supermercado unas 100 veces al año de media, destinando a estos productos cerca de 24 euros semanales”.
Las marcas propias se ganan a los clientes
El crecimiento de la marca blanca de las diferentes cadenas de distribución que hay en España forma parte de una tendencia a largo plazo, impulsada por la percepción de calidad, confianza y ahorro que ofrecen los productos de marca propia. Así, gracias a Aldi, Dia, Mercadona y Lidl, se ha convertido en un pilar clave del consumo en nuestro país y ha duplicado su cuota de mercado en los últimos 20 años.
Desde Dia señalan que la marca propia se mantiene entre las cinco primeras en las estrategias de ahorro ya que el 59% de los clientes afirman que adquirir productos de marca de distribuidor les ayuda a reducir el gasto en la cesta de la compra.
En Aldi, Dia, Mercadona y Lidl, con el paso de los años, han ido creando sus propios departamentos de desarrollo de productos, concepto, diseño y envasado para diferencia su oferta. Así, en vez de adoptar marcas que abarcan diferentes categorías, suelen utilizar marcas específicas de cada categoría, diseñadas para evocar emociones específicas y atraer a diferentes grupos de clientes.
Desde el año 2022, el volumen comprado de marca propia en los diferentes supermercados ha crecido en 9 puntos, lo que le hace ser un elemento esencial en el consumo familiar en nuestro país. No obstante, no hay que olvidar que cadenas como Dia y Aldi aplican una gran parte de sus promociones a los productos de su propia marca, empujando al cliente a que pueda comprar dichos productos para ahorrar en el ticket final.
El precio y la calidad ya no son un barrera
Las familias españolas apuestan por los productos de marca propia, sobre todo, por su buena relación calidad-precio. Con un precio más bajo, que también influye, la calidad se consolida como uno de los atributos principales asociados a la marca propia de las diferentes cadenas de distribución, como es el caso de las de Aldi, Dia y Mercadona.
Es más, hay que destacar que cada vez son más los clientes que consideran que las marcas blancas de estas firmas ha mejorado en calidad en los últimos años. Esta es una percepción que ayuda a las grandes cadenas en cuanto a ingresos y ventas por parte del cliente en su cesta de la compra.