España presume de tener una de las leyes de transparencia más avanzadas de Europa, pero la realidad demuestra que todavía queda mucho por hacer; y es que más de 1.000 ayuntamientos del país no publican el sueldo de su alcalde, a pesar de que están legalmente obligados a hacerlo, lo que supone que una parte importante de los municipios españoles está incumpliendo la normativa que exige que cualquier ciudadano pueda conocer cuánto cobra su representante local.
Esta cuestión no es algo menor o que deba pasar desapercibido, ya que este dato no es solo algo anecdótico y que nos puede generar curiosidad, sino que es toda una garantía de control democrático y que viene establecido en la Ley de Transparencia, en la que se establece que todo los cargos públicos deben hacer públicos, valga la redundancia, de sus ingresos, a fin de evitar abusos. A pesar de esto, según los últimos datos que ha podido recopilar el Ministerio de Hacienda y otras organizaciones independientes, hay más de 1.300 consistorios que no están publicando dicha información, toda una vulneración al derecho de los ciudadanos de conocer esta cuestión.
Cuánto debe ganar un alcalde en España
El sueldo de un alcalde depende, sobre todo, del tamaño del municipio, de si se dedica en exclusiva a este cargo y del presupuesto del propio consistorio; por lo que es lógico suponer que cuanto más grande sea un ayuntamiento, más sueldo tendrá este cargo público, pudiendo superar los 100.000 euros brutos anuales. En 2023, por ejemplo, el alcalde de Madrid percibió 108.517 euros al año; el de Barcelona, 104.240 euros; y el de Bilbao, 103.991 euros. Son los tres más altos del país, seguidos de Donostia, Valencia y Sevilla.
Esta situación cambia radicalmente en localidades pequeñas, donde el alcalde puede ganar menos de 40.000 euros anuales o incluso nada, ya que muchos compatibilizan el cargo con su empleo habitual. Pero es que conocer esta información es importante, ya que sin transparencia no podemos saber si los sueldos que se ponen están dentro de los límites legales o si ha habido alguna subida que no tenga justificación tras unas elecciones municipales; y es que después de los comicios de 2023, más de 600 alcaldes se subieron su salario.
Qué limites marca la ley
Esta normativa establece que hay una serie de máximos salariales para cada tramo de población, de tal forma que si una persona es el alcalde de un municipio con más de 500.000 habitantes no puede cobrar más de 116.160 euros brutos al año, mientras que en los pueblos con menos de 1.000 habitantes, el sueldo no puede ser más de 34.848 euros. Y es que en los municipios más pequeños, el alcalde suele tener dedicación parcial y cobrar solo por asistencia a plenos o comisiones, algo que no pasa en ciudades medianas o grandes, la dedicación suele ser exclusiva, y ahí entran en juego los complementos, las dietas y las indemnizaciones.
Todo este debate en torno a los sueldos que tienen los alcaldes no es nuevo, pero es que la falta de información agrava la problemática, ya que el hecho de encontrar que más de mil ayuntamientos no publican lo que gana este cargo público no solo es algo que incumpla la Ley de Transparencia, sino que genera mucha desconfianza entre los vecinos, más aún cuando hablamos de municipios pequeños, en los que todo el mundo se conoce.
El Consejo de Transparencia y Buen Gobierno ya ha advertido en varias ocasiones que no hacerlo puede acarrear sanciones, aunque en la práctica pocas veces se aplican. Y es que en una democracia, esta confianza debe ser restituida, dando datos y no secretos, ya que estos últimos no pueden ser la base de nada bueno y solo nos hacen pensar “¿qué tienen que ocultar a quienes les han elegido?”.