El 2026 traerá buenas noticias para un colectivo importante en nuestro país, el de pensionistas. Millones de personas verán un incremente en sus prestaciones debido a la revalorización anual de la inflación. Aunque el dato definitivo no se podrá conocer hasta el próximo mes de diciembre, todo apunta a que la subida rondará el 2,6% siguiendo la evolución de los precios que se registró entre el mes de diciembre 2024 y este noviembre.
Este incremento afectará tanto a las pensiones contributivas como a las de viudedad y con cargas familiares. De este modo, la máxima podría alcanzar los 3.355 euros al mes y la mínima, con cónyuge a cargo, los 1.158 euros al mes. En cuanto a las no contributivas, estarna en 8.111 al año.
El cálculo de la subida de las pensiones se realiza mediante el mecanismo automático aprobado en la reforma de 2021, que vincula el incremento al Índice de Precios de Consumo (IPC) medio del periodo de referencia. Esto quiere decir que, una vez que el dato oficial del IPC de noviembre se publique por el Instituto Nacional de Estadística (INE), se aplicará el porcentaje de revalorización a partir del 1 de enero de 2026. La fecha en la que se conocerá la cifra definitiva será el 12 de diciembre.
Así será la subida en 2026
De acuerdo a las estimaciones actuales, la inflación anual estará cerca del 2,6%, lo que implica que las pensiones contributivas experimentarán un aumento proporcional. Así, por ejemplo, la pensión de jubilación media, que en estos momentos está en 1.506 euros al mes, pasaría a 1.544 euros. La pensión máxima, gracias al mecanismo adicional de la reforma, podría crecer algo más del 2,7%, pasando de los 3.267,60 euros a unos 3.355 euros al mes.
En cuanto a las pensiones de viudedad, que hoy alcanzan de media 935 euros, subirían hasta 958 euros, mientras que las de incapacidad permanente aumentarían de 1.209 euros a 1.239 euros al mes, siguiendo la misma proporción.
Respecto a las pensiones mínimas, tanto contributivas como las de viudedad con cargas familiares, tendrán un incremento superior al IPC para acercarlas a los estándares europeos y reducir la brecha de pobreza entre los mayores. Por ejemplo, la pensión mínima sin cónyuge pasará de 874 euros al mes a 897 euros, mientras que la mínima con cónyuge a cargo se elevará de 1.127 euros a 1.158 euros.
Las pensiones no contributivas anuales, actualmente en 7.905 euros, se estima que llegarán a 8.111 euros.
Cambios en el sistema de pensiones
Más allá del ajuste por inflación, la reforma de 2021 introdujo cambios estructurales en el sistema que entrarán en vigor en 2026. Entre ellos destaca el sistema dual para calcular la pensión según los años cotizados y los últimos salarios percibidos.
“A partir de 2026, se elegirá la opción de base reguladora que resulte de más importe, entre considerar para su cálculo: los últimos 25 años cotizados (tenidos en cuenta en la actualidad, hasta 2025) y una segunda opción que, en 2037, tras un periodo transitorio, serán los mejores 27 años entre los 29 años previos al acceso a la jubilación”, aseguran desde el BBVA.
En cuanto a la edad de jubilación ordinaria, la misma se situará en 66 años y 10 meses para quienes no alcancen los 38 años y 3 meses cotizados, mientras que quienes cumplan este requisito podrán jubilarse a los 65 años.
Por tanto, en el próximo 2026, la subida permitirá que millones de españoles aumenten sus ingresos. Para finalizar, destacar que el Fondo Monetario Internacional (FMI) advierte que nuestro país será el cuarto país avanzado que mayor esfuerzo deberá realizar para financiar pensiones hasta 2050.
La subida es una mierda