La propuesta por una renta básica incondicional, ha obtenido una atención creciente a lo largo de los últimos años por parte de medios de comunicación, activistas sociales, partidos políticos y estamentos académicos.
Sin embargo, a día de hoy, es una propuesta, tanto a nivel nacional como internacional, que genera bastante debate. Es por ello que vamos a tratar de arrojar luz sobre su naturaleza, y objetivos, así como de su viabilidad.
En qué consiste
La renta básica incondicional, es una asignación monetaria a toda la población sin ningún tipo de condición. Es decir: un pago monetario regular a toda la población, de forma individual, sin comprobación de recursos económicos ni de su situación laboral.
El concepto del ingreso básico incondicional es, en principio, muy fácil: cada persona recibe del Estado una suma fija por mes, sin importar quién es ni a qué se dedica. Este no puede ser recortado, ni existe la obligación de realizar ningún tipo de tarea a cambio. Y se permite trabajar y así aumentar los ingresos.
Posibles beneficiarios
Toda persona adulta del territorio en donde se implantase. Es decir, absolutamente toda la ciudadanía y residentes acreditados. Además de las personas adultas, existe el debate de si los menores podrían beneficiarse de ella también.
Con respecto a ello, se han aportado criterios para defender tres posibles respuestas:
- La primera respuesta equipararía a los menores de edad con los adultos y, en consecuencia, no se establecería diferencia alguna en la percepción de la RBI: ni por edad, ni por cuantía.
- La segunda respuesta simplemente excluye de la percepción de la RBI a la población menor de edad.
- La tercera respuesta, defiende que la RBI que percibirían los menores sería una cantidad inferior a la población adulta.
Motivos por los que se apuesta por una RBI
1. El fracaso de los subsidios condicionados.
Por fracaso debe entenderse la diferencia entre lo que pretendían y lo que han conseguido estos subsidios condicionados. La experiencia de décadas que se tiene de ellos en distintos países permite hacer un balance más general. Lo interesante es ver sus limitaciones y cómo la RB podría superar los problemas o limitaciones de estos subsidios condicionados.
2. El trabajo asalariado ya no es garantía de evitar la pobreza.
El incremento de los trabajos precarios es una constatación, ya que, parte de la población, a pesar de contar con empleo legal, puede considerarse pobre o con ingresos límites.
3. Proliferación de experimentos sobre la RBI.
En los últimos años se han puesto en funcionamiento o están aún vigentes experimentos (muy parciales) de RBI, por ejemplo, en algunos países de Europa.
4. Las condiciones de vida y trabajo cada vez peores de buena parte de la población.
Aunque se habla de recuperación económica, las condiciones de la gran mayoría de la población son peores que antes del estallido de la gran crisis hace una década. Esta realidad también ha motivado que la RBI sea vista por cada vez más personas como una medida de aplicación inmediata para hacer frente a esta situación.
Financiación y presupuestos destinados a la RBI
Una de las cuestiones fundamentales que se nos plantean es la de la cifra que sería necesaria para poder hacer frente a tal modelo de renta. Al parecer, se han realizado diversas simulaciones e informes que arrojan luz sobre su financiación, y muestran como posible y solvente el hacer frente a esta RBI. La mayoría en nuestro país se basan en datos que provienen de la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) del INE de los años 2017 y 2018.
Si bien no vamos a incluir los informes completos, podemos resumir con algunas claves lo que nos muestran estos presupuestos de cara a la financiación de la renta básica.
- La RB está exenta de IRPF. Se empieza a gravar a partir del primer euro que se gana a partir de la RB.
- Cualquier prestación monetaria pública inferior a la RB queda eliminada, y cuando es superior a la RB se complementa a la misma para que el/la perceptor/a no pierda.
- La RB se autofinancia, es decir, no genera un déficit neto estructural. Lo que quiere decir que lo que se recauda en IRPF anteriormente se sigue recaudando además de lo necesario para financiar la RB.
- El impacto distributivo es muy progresivo en los diferentes modelos, si bien en unos más que otros.
- Más del 50% de la población adulta con menos ingresos en todos los modelos gana renta neta respecto a la situación actual, y obviamente casi el 100% de los menores.
- La población de rentas bajas no se vería perjudicada, pretendiendo que aquellos que más ganen, aporten más.
Ejemplos de distintas propuestas en Europa
La idea de un salario básico incondicional se está discutiendo en varios países europeos. Ahora, una iniciativa ciudadana solicita que también la Comisión Europea (CE) se ocupe del tema. Pide que la CE presente una propuesta para un salario básico incondicional en toda la Unión Europea a fin de reducir las diferencias regionales y fortalecer la unidad económica y social en Europa.
La iniciativa será exitosa si en el lapso de un año un millón de votantes de la UE la firman, y, al mismo tiempo, se logra reunir un mínimo determinado de firmas en siete países de la comunidad europea. En este momento, ese es un objetivo aún lejano, aunque se sigue avanzando en distintos países europeos.
Por ejemplo, en Polonia y Malta el debate público acerca del ingreso básico incondicional apenas existe. Mientras que en Alemania, si genera mayor movimiento. Muy distinto es lo que sucede en Francia, donde la escena de quienes apoyan la renta básica universal es mucho más amplia y heterogénea.
Suiza fue el primer país europeo que votó en un referéndum sobre el pago de un ingreso básico mensual estatal, hace cuatro años. Pero la iniciativa fracasó estrepitosamente: casi un 77% de los suizos rechazaron la renta básica universal.
En Finlandia, entre 2017 y 2018, 2.000 finlandesas y finlandeses desempleados recibieron un sueldo básico mensual de 560 euros, en lugar de la ayuda al desempleo. Sin solicitudes, ni formularios que rellenar, ni burocracia alguna. Y se les permitió ganar tanto como quisieran adicionalmente.
De acuerdo con los resultados del estudio, los participantes se beneficiaron a nivel psicológico: se sentían más felices y tranquilos. La seguridad económica también les daría la posibilidad de probar nuevos caminos profesionales sin el riesgo de quedar eventualmente en bancarrota. Pero en el mercado laboral finlandés, el proyecto no tuvo ningún efecto. En promedio, los participantes trabajaron solo seis días más al año que las personas sin ingreso básico incondicional del grupo de control de la investigación.
La propuesta en el País Vasco
En nuestro país apenas se ha tratado de manera pública esta cuestión, sin embargo, parece que donde más se está apostando por ella es en el País Vasco.
Se apuesta por una renta que redistribuya la riqueza, repiense el trabajo y garantice una vida digna. Una inyección mensual cuyo coste rondaría los 2.000 millones de euros anuales (la actual Renta de Garantía de Ingresos supone 550 millones), y que se financiaría a través de los Presupuestos Generales de Euskadi, subiendo los impuestos a quienes más tienen.
Se trataría de una asignación económica mensual, universal e individual de 900 euros para todas las personas mayores de 18 años y de entre 270 y 450 euros para todos los menores de edad. Una renta cuyo único requisito para recibirla, de ahí su incondicionalidad, será llevar tres meses de residencia en Euskadi antes de su solicitud.
Según afirman, la nueva renta ahorrará costes administrativos, evitará que las personas que están percibiendo un subsidio queden atrapadas en la pobreza y acabará con el estigma social que persigue a la población perceptora de ayudas sociales. Además, según sus promotores, garantizará unos recursos mínimos para que el conjunto de la sociedad tenga “más libertad y menos miedo para decidir”, una mayor autonomía a la hora de elegir empleos “más dignos”, aumentando, por ejemplo, la posibilidad de autonomía de miles de mujeres que se encuentran en situación de dependencia respecto a sus parejas.
Actualmente se encuentran recogiendo firmas, teniendo que alcanzar las 10.000 firmas en cuatro meses, para poder presentar la propuesta.
Críticas y dudas sobre su efectividad
Esta renta, al igual que tiene defensores, tiene detractores, y no pocos. Muchos son los que no ven nada claro ese nuevo modelo de sustentación de la población, y presentan múltiples inconvenientes, como, por ejemplo:
- El modelo de financiación resulta insuficiente y presenta deficiencias.
- Los presupuestos no alcanzarán las cifras necesarias, y los impuestos acabarán recayendo en las clases más bajas.
- La mayoría de la gente preferiría no trabajar en absoluto.
- Es preferible destinar tales cantidades de dinero al fomento del empleo.
Si bien todo ello son supuestos, y especulaciones, ya que los experimentos realizados y los estudios presentados, no son más que teoría, o ejemplos que no pueden extrapolarse a la población total.
Renta básica incondicional
Sin duda, la idea de una renta básica incondicional constituye un proyecto ambicioso. Sobre el papel resulta una propuesta interesante y no solo eso, necesaria. Estamos de acuerdo en que las actuales rentas y prestaciones fallan, en múltiples aspectos, no solo por su carácter condicional.
Las rentas mínimas autonómicas, que se encuentran instauradas desde hace décadas, no han supuesto solución alguna para erradicar los niveles tan altos de pobreza, y el aclamado Ingreso Mínimo Vital, que no llega al año de vida, ha presentado más problemas y fallos de los que ha solventado.
La población española se ahoga entre gastos que no pueden afrontar, con una precariedad que se viene arrastrando desde hace casi 15 años, y que la pandemia ha acabado por rematar. Necesitamos muchos cambios en el sistema de nuestro país para que podamos salir a flote, y tener una vida digna, sin el miedo constante a no llegar a fin de mes.
Pero, ¿es la renta básica incondicional la respuesta a todo? Sus defensores apuestan por el sí. Si bien parece bien enfocada y planteada, a priori, resulta algo utópica e inalcanzable.
Lo que si es cierto es que, ya sea con la RBI o con cualquier otra medida, la necesidad de cambio es urgente y las propuestas como las de esta renta son totalmente necesarias, para poder generar debate e intercambio de ideas y así, conformar una solución que nos garantice una calidad de vida digna y suficiente.