Casi no nos daría tiempo ni a acomodarnos en el asiento. Los 627 kilómetros de distancia entre Madrid y Barcelona se harían prácticamente sin darnos cuenta con el tren más rápido del mundo, el que tendrá China. Y es que el gigante asiático ha decidido ir un paso más allá en cuanto a la alta velocidad con la creación del CR450, un tren que en pruebas ha alcanzado los 453 kilómetros por hora. Por tanto, este tren uniría las dos grandes ciudades de nuestro país en poco más de una hora.
Este nuevo invento se centra en el desafío que tiene China de perfeccionar la tecnología ferroviaria de última generación. El nuevo tren, CR450, está diseñado para llegar a una velocidad comercial de 400 km/h y, como es lógico, se convertiría en el tren más rápido del mundo en servicio regular, superando al CR400, que llega a los 350 km/h.
Las pruebas de seguridad sobre este tren
El tren tiene un diseño aerodinámico con un morro de 20 centímetros, un peso de 50 toneladas y una estructura diseñada para disminuir la resistencia del aire en un 20%. Todos estos componentes hacen que pueda acelerar de 0 a 350 km/h en sólo 4 minutos y 40 segundos.
Pero antes de poder admitir pasajeros, el CR450 tendrá que completar 600.000 kilómetros de pruebas para comprobar que es seguro y confiable a un velocidad de 400 km/h. Por el momento, las primeras distancias que están recorriendo son en la línea de alta velocidad que une las ciudades de Shanghái y Chengdu. Si consigue pasar las pruebas de seguridad, permitirá conectar regiones distantes en un tiempo realmente corto, algo que hace unos años parecía totalmente imposible.
Gran parte de lo avanzado hasta la fecha con el CR450 se entiende al mirar dentro de su ingeniería. El tren incorpora imanes permanentes con una potencia total de 11.000 kW. También se ha reducido el peso en unas 50 toneladas gracias al uso de fibra de carbono y aleaciones magnesio y el perfil aerodinámico se ha optimizado con un morro más largo de unos 15 metros. Así, los expertos asegura que a 400 km/h el nivel de ruido dentro del vagón apenas alcanza los 68 decibelios.
El desarrollo de este nuevo proyecto, el CR450, está repartido entre dos de los principales fabricantes de trenes del país. La versión CR450AF ha sido construida por CRRC Qingdao Sifang, mientras que la CR450BF corre a cargo de CRRC Changchun. Ambas comparten una configuración de ocho coches, cuatro motores y otros cuatro de remolque. Las informaciones oficiales asegura que incorporan sistemas avanzados de comunicación y frenado, además de bogies de alta estabilidad diseñados para mantener el equilibrio en pruebas de velocidad extrema.
Por el momento, según las autoridades que están detrás del CR450, ““no existe ninguna referencia que se pueda usar en otros países, tenemos que ser pioneros y encontrar respuestas”. Por tanto, habrá que esperar para verlo en España.
Y ya piensa en el siguiente paso
Todavía no se ha puesto en marcha el CR450 y China está pensando en el siguiente objetivo. Esto se debe a su necesidad de innovar de forma constante. El país asiático piensa en algunos prototipos magnéticos que podrían dejar atrás los 600 km/h, pero se trata de una fase que todavía se encuentra en laboratorio.
Lo que pretende China es dejar claro, una vez más, su gran poder tecnológico al combinar innovación, eficiencia energética y control digital. De esta manera, busca dominar un sector que en la actualidad lideran Japón y la Europa.