Está ciudad no recibe la atención que merece y muchas veces queda eclipsada, a la sombra de titanes como Madrid, Barcelona o Sevilla. Sin embargo, merece ser descubierta, ya que tiene un patrimonio histórico y un paisaje natural excepcional. En cambio, solo los viajeros más conocedores le dan una oportunidad. Los que lo hacen dicen que le recuerda muchísimo a otra ciudad de Grecia.
Alejarse del famoso turismo masivo todavía es posible en España. Para hacerlo nos vamos a Cuenca, con su increíble casco antiguo y sus icónicas casas colgadas sobre el río Huécar, que muchos comparan con los monasterios de Meteora en Grecia.
Éstos últimos son templos ortodoxos que se yerguen majestuosamente sobre rocas, desafiando la gravedad de la misma forma que las casas conquenses. Parecen encontrarse en el vacío como las casas colgadas y, además, se construyeron entre los siglos XIV y XVI con una ubicación casi inconcebible, para ser refugios espirituales.
El gran ingenio arquitectónico para hacer turismo
En cambio, esta muestra del ingenio arquitectónico del siglo XII y XV , que se puede equiparar a la griega, no es lo único que merece la pena visitar en Cuenca. Se debe mencionar su Catedral de Santa María y San Julián, uno de los templos más impresionantes de España, con su fachada gótica y sus 20 capillas interiores.
Además, merece la pena descubrir la Plaza Mayor llena de edificios de colores, con el Ayuntamiento de estilo barroco y su entrada con tres arcos. Sin embargo, la óptima forma de conocer Cuenca es pasear sus callejuelas, perderse por el barrio histórico de Santa Catalina y subir y bajar las eternas escaleras.
En muchas ocasiones miramos con envidia a países vecinos y el pensamiento de “el césped del vecino siempre es más verde” en muchas ocasiones aparece. Con Cuenca y Grecia ocurre lo mismo que con Mérida y Roma, es un buen recordatorio de que en nuestras fronteras tenemos joyas que no son muy conocidas por los extranjeros y que, asimismo, no tienen que envidiar a otras atracciones turísticas internacionales.
Seis lugares para visitar a menos de una hora de Cuenca
A parte de conocer la capital, a continuación, dejamos varios pueblos que son igual de encantadores y que solo están a treinta minutos. Aquí dejamos una pequeña lista con información:
- Ciudad Encantada: uno de los parajes naturales más fascinantes y conocidos en la provincia de Cuenca. Conocida por sus formaciones rocosas únicas que parecen haber sido esculpidas por la mano del hombre. En realidad, son el resultado de la erosión kárstica, que ha moldeado las rocas a lo largo de miles de años. Algunas de las más reconocibles son “el rostro del guerrero”, “la casa del moro” o “la tortuga”. Existen miradores que ofrecen vistas panorámicas de este impresionante paisaje que alberga una gran variedad de flora y fauna, incluyendo especies típicas del ecosistema mediterráneo y montañoso. El rincón perfecto para que los observadores de aves y los amantes de la naturaleza pueden disfrutar de la biodiversidad local.
- Minglanilla: Es un destino perfecto para quienes buscan una experiencia auténtica y relajante en el corazón de Castilla-La Mancha. Con su rica herencia cultural, su entorno natural y su hospitalidad local, ofrece una visión única de calles empedradas y casas de estilo tradicional. Además. cuenta con una buena cantidad de eventos, ya que el ayuntamiento organiza durante todo el año diversas ferias y mercados en los que descubrir productos artesanales y locales.
- Valdecabras: Una pintoresca aldea situada en pleno Parque Natural de la Serranía de Cuenca. Este pueblo destaca por sus calles empedradas y su pintoresco encanto que dibujan un entorno de cuento rodeado por bosques frondosos e impresionantes montañas. Hay varias rutas de senderismo en los alrededores de Valdecabras que permiten explorar el paisaje montañoso y disfrutar de la naturaleza. Estas son aptas para diferentes niveles de dificultad y ofrecen vistas panorámicas para ver todo el lugar.
- Parque Natural de la Serranía de Cuenca: Una zona protegida por su característica geografía, rica biodiversidad y hermosos paisajes. El parque es un destino destacado para los amantes de la naturaleza, el senderismo y la aventura al aire libre. No son pocas las rutas que se pueden hacer pasando por los pueblos cercanos. Además, este lugar es perfecto para todos los que buscan un sitio para practicar escalada o barranquismo, ya que sus formaciones rocosas son perfectas para estas actividades. Sin embargo, se debe tener cuidado por el nivel experimentado que requiere.