Cuando una persona no actúa de la manera correcta, debe saber si que las consecuencias pueden ser fatales. Es lo que le ocurrió a una trabajadora de Viajes El Corte Inglés, que ha visto como como ha sido despedida por usar como no debía cupones promocionales destinados a los clientes para comprarse dos iPhones valorados en 1.798 euros. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid considera su despido procedente porque su comportamiento fue intencionado y fraudulento, además de que no reconoció los hechos hasta que fue descubierta y perjudicó a la empresa.
Se hizo con dos teléfonos de alta gama
La mujer llevaba trabajando para Viajes El Corte Inglés desde noviembre de 2001 y llegó a ocupar un puesto en el Departamento de Estrategia de Clientes. Una de sus tareas era la de gestión de incidencias relacionadas con los cupones promocionales que la empresa ofrecía a los clientes como parte de las campañas comerciales vinculadas a la reserva de viajes. Estos cupones, enviados de forma digital y canjeables en centro de la firma podían alcanzar los 500 euros y se otorgaban a quienes contrataban viajes por un valor igual o superior a 8.501 euros. Su número era limitado y estaba sujetos a un estricto control interno.
Esta persona tenía acceso a los cupones por su cargo dentro de Viajes El Corte Inglés y podía también consultar y tramitar incidencias relativas a su uso. Fue precisamente este acceso lo que permitió que, el 1 de julio de 2023, realizara una compra a través de la web de la compañía, fuera de su jornada laboral y también fuera del centro de trabajo. La trabajadora se hizo con dos teléfonos de gama alta, iPhone 14, por un importe total de 1.798 euros. En la compra utilizó cinco cupones que habían sido asignados a clientes reales: tres de 500 euros, uno de 200 euros y otro de 50 euros, abonando además los 48 restantes con su propia tarjeta de cliente.
Intentó dar marcha atrás al día siguiente
Un día más tarde, la trabajadora procedió a anular la compra a través de la misma plataforma, pero ya era tarde. Los cupones estaban ya desactivados del sistema, lo que impedía que pudieran volver a ser utilizados.
A comienzos de septiembre, uno de los clientes a los que pertenecía uno de esos bonos de Viajes El Corte Inglés intentó utilizarlo, encontrándose con que ya estaba canjeado. La situación derivó en una en una investigación interna, lo que permitió rastrear la operación hasta la cuenta de la trabajadora y el caso se puso en conocimiento del departamento de Recursos Humanos.
Alegó un error
La empleada de Viajes El Corte Inglés fue citada y en sus alegaciones comentó que el uso de los cupones se debió a un error y que había procedido a cancelar la compra en el momento en el que fue consciente de ello. Dijo que no había ningún ánimo de lucro ni la intención de perjudicar a la empresa y recordó que su historial laboral era intachable. A pesar de todo esto, el 25 de octubre de 2023, la empresa le notificó el despido por causas disciplinarias, calificando los hechos como una infracción muy grave de acuerdo al convenio de agencias de viajes.
El Corte Inglés la llevó a los juzgados
El acto de conciliación con Viajes El Corte Inglés finalizó sin acuerdo y la afectada presentó una demanda por despido improcedente, pero el Juzgado de lo Social nº 14 de Madrid resolvió el caso con una sentencia que avalaba la legalidad del despido. Contra esta resolución hubo un recurso de suplicación ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
El TSJ de Madrid determinó que aunque la trabajadora anuló la compra al día siguiente, su comportamiento fue intencionado y fraudulento y añadió que reconoció los hechos hasta que fue descubierta. Además, perjudicó a la empresa ya que uno de los clientes afectados intentó hacer uso del abono sin éxito.