Si te encuentras empleado y te preguntas cómo puedes conciliar mejor tu vida laboral y tu vida familiar, debes conocer un derecho que tienen todos los trabajadores, y es que hay una ley que reconoce el derecho a que puedas adaptar tu horario de trabajo para atender las necesidades de tu familia. Todo esto se encuentra amparado en el Estatuto de los Trabajadores, en el cual se establece que, siempre que haya una justificación razonable, vas a poder solicitar una serie de cambios en cuanto a la duración, distribución o forma de prestación de tu jornada laboral en pro de favorecer la conciliación, y todo ello sin que te reduzcan las horas que trabajas.
Este derecho se aplica especialmente en situaciones como el cuidado de hijos menores de 12 años, familiares dependientes o personas que convivan contigo y necesiten asistencia; además de que estas modificaciones en tu horario no solo te van a permitir atender a tus responsabilidades familiares, sino que se ha visto un beneficio en la productividad y el bienestar de los empleados cuando este factor se cumple.
Qué dice el Estatuto de Trabajadores sobre el cambio de horario
El artículo 34.8 del Estatuto de los Trabajadores recoge de manera explícita la posibilidad de solicitar adaptaciones del horario de la siguiente forma: “Las personas trabajadoras tienen derecho a solicitar las adaptaciones de la duración y distribución de la jornada de trabajo, en la ordenación del tiempo de trabajo y en la forma de prestación, incluida la prestación de su trabajo a distancia, para hacer efectivo su derecho a la conciliación de la vida familiar y laboral”.
¿Qué quiere decir esto? Esto significa que tu horario en una empresa puede modificarse en cuanto a lo relacionado a las horas en las que empiezas y acaba la jornada laboral de tal forma que se adapte mejor a las rutinas familiares, o incluso se facilitan otras modalidades más acordes como lo es el teletrabajo. A pesar de esto, hay que tener en cuenta que, si bien se permiten cambios, esto no es a la carta, ya que la empresa puede plantear razones organizativas o productos que limiten las modificaciones solicitadas, aunque esta debe aportar una justificación detallada de la negativa.
Es por ello que, el éxito o fracaso de la solicitud depende de una argumentación sólida por parte de ambos, tanto del trabajador como de la empresa, así como de un buen diálogo entre las diferentes partes implicadas.
Cómo solicitar correctamente la adaptación de tu horario
El primer paso para cambiar tu horario es presentar la solicitud por escrito, detallando las razones que justifican la adaptación y, posteriormente, la empresa dispone de un plazo máximo de 15 días para negociar contigo, momento en el que puede aceptar la propuesta, proponer diferentes alternativas o denegar la misma aportando diferentes motivos de peso, todo ellos, como ya hemos comentado, aportando una justificación clara y detallada. En caso de que no haya una respuesta en ese plazo, se entenderá que la solicitud ha quedado aceptada por parte de la empresa. ya que, como bien dice el dicho español “quien calla, otorga”.
El horario solicitado puede afectar al cuidado de hijos, personas dependientes o cónyuges con necesidades especiales, aunque en todos estos casos, se debe demostrar la relación de parentesco o convivencia y la necesidad de modificar la jornada para ofrecer dichos cuidados. Aparte de los plazos mencionados, también se dispone de un plazo de 20 días hábiles para llevar la reclamación ante el Juzgado de lo Social en caso de que no se llegue a un acuerdo, un derecho avalado también por el propio Estatuto de los Trabajadores.