Con estos trucos de expertos bajarás el precio de las facturas de la luz sin esfuerzo

En una época como el verano, en la que tenemos los ventiladores o aires acondicionados echando humo por el uso, reducir la factura de la luz parece algo casi imposible de conseguir, o al menos lo era hasta ahora. Y es que algunos expertos han compartido una serie de trucos que todos podemos llevar a cabo para que, al final de mes, lo que tenemos que pagar en este concepto sea menos que antes. Lo mejor de todo es que no implica realizar una inversión o tener conocimientos específicos para lograrlo, sino que, simplemente, debemos cambiar ciertos hábitos que muchos de nosotros tenemos y un poco de organización.

El consejo que más te va a servir debido a su eficacia tiene mucho que ver con el cuadro eléctrico, ese gran desconocido que tienen todas las casas y que nos da hasta miedo toquetear. Lo único que hay que hacer en esos interruptores escondidos tras esa puertecita blanca es etiquetarlos correctamente, ya que de esta forma los podremos controlar con mucha más precisión para que, de cara a unas vacaciones o periodos largos fuera de casa, podamos bajar los que se corresponden con las zonas de la casa que más energía consumen, ya que en esos momentos no será necesario que sigan funcionando.

El truco del cuadro eléctrico: así se reduce la factura sin darte cuenta

La mayoría de personas no sabe qué controla cada palanca del cuadro eléctrico de su casa, pero una vez etiquetadas (por ejemplo: salón, cocina, aire acondicionado), podremos ver todas las posibilidades de uso que tienen. Si vas a pasar unos días fuera, puedes desconectar de forma segura las zonas que no vas a utilizar, dejando solo activa la cocina si necesitas mantener la nevera encendida, una simple acción que te va ayudar bastante a final de mes.

Además de permitir un ahorro directo, este truco mejora la seguridad eléctrica del hogar y facilita las tareas de mantenimiento, ya que según electricistas consultados, también ayuda a reaccionar con mayor rapidez ante apagones o sobrecargas, lo que evita errores que podrían costar caros tanto en electrodomésticos como en consumo, algo que pudimos apreciar bastante bien en el último apagón masivo que sufrimos.

Cómo el móvil puede ayudarte a controlar tu consumo

Hoy en día, el teléfono móvil sirve para casi todo: desde pagar en el supermercado hasta consultar el banco o controlar la salud. Pero lo que quizá no sabías es que también puedes usarlo para reducir la factura eléctrica, ya que existen aplicaciones y sistemas domóticos que permiten monitorizar el consumo en tiempo real, encender y apagar dispositivos a distancia y, sobre todo, identificar qué aparatos están incrementando por mucho tu gasto.

Este tipo de soluciones ya se está incorporando en muchas viviendas nuevas, y no son tan inaccesibles o complicados como pueda parecer a primera vista, ya que incluso con una pequeña inversión inicial, el retorno se nota muy pronto en la factura. Durante el verano, por ejemplo, puedes programar el aire acondicionado para que se apague cuando alcanzas una temperatura adecuada o se encienda justo antes de llegar a casa, evitando así consumos innecesarios.

Pequeños gestos que tu factura agradecerá

Si bien la tecnología es una muy buena aliada para intentar que tu factura de la luz sea algo más baja que de costumbre, también podemos incorporar ciertos hábitos más tradicionales pero, aún así, siguen siendo muy útiles. Algunos de ellos son tan sencillos como bajar las persianas durante las horas de más calor del día, ventilar cuando refresca o evitar el uso de electrodomésticos en las franjas horarias más caras.

Otro de los puntos a tener en cuenta es si nuestros electrodomésticos son eficientes o si es posible complementar (o, incluso, sustituir) el uso del aire acondicionado por un ventilador de techo.