Se acerca el año 2025 y, con él, cambios. Muchos cambios. Una subida que, este año, es más esperada que nunca. La misma forma parte de las reformas en el sistema de pensiones y busca asegurar que los jubilados no pierdan poder adquisitivo frente a la inflación y al constante aumento de los precios.
Más de 10 millones de jubilados se beneficiarán de la subida
En España, más de 10 millones de personas(casi nada) reciben, cada mes, pensiones contributivas. Un dato clave es que, aunque casi todos son pensionistas, se incluyen pensiones por viudedad, incapacidad permanente, orfandad y aquellas a favor de familiares. Estas personas verán cómo su cuenta del banco crece un poco más, principalmente debido a la aplicación del Índice de Precios al Consumo (IPC), el cual refleja el aumento en el coste de la vida.
Subida de las pensiones contributivas
Las pensiones contributivas dependen de las cotizaciones que los trabajadores realizaron durante su vida laboral. Estas prestaciones se incrementarán en 2025 en función del IPC. Aunque aún no se ha confirmado el porcentaje exacto, se estima que la subida será cercana al 3%, un poco por debajo de la del año anterior, pero igual de sustancial. Este ajuste, además, ayuda a asegurar que los pensionistas puedan afrontar los incrementos en los precios de bienes y servicios básicos, como el simple hecho de comprar una botella de aceite de oliva.
Un dato significativo es que las pensiones máximas también experimentarán un aumento adicional del 0,115% sobre el IPC, una medida que continuará cada año hasta 2050. Esta decisión busca reducir las diferencias entre las prestaciones mínimas y máximas, todo para que la palabra justicia cobre sentido.
Aumento “sustancial” de las pensiones no contributivas
Las pensiones no contributivas, que están destinadas a personas que no han podido cotizar lo suficiente para recibir una pensión contributiva, verán un incremento notable en 2025. En concreto, subirán en 350 euros cada año, lo que llevará el total anual a 7.599 euros, o alrededor de 542,85 euros al mes. Este aumento es parte de un plan más estudiado para mejorar la vida de los pensionistas que más lo necesitan, aquellos que, por diversas razones, no han podido alcanzar los 15 años mínimos de cotización.
Requisitos para acceder a las pensiones no contributivas
No todo el mundo tiene derecho a tener una de estas prestaciones. Únicamente aquellos que no cumplen con los años mínimos de cotización. Eso sí, para acceder a ellas es necesario tener al menos 65 años y haber residido en España durante al menos 10 años. Además, los ingresos anuales no deben superar la cantidad de 7.250 euros. Este tipo de pensiones se dirige a personas en situaciones vulnerables, como quienes han trabajado en el hogar sin remuneración o en empleos precarios o espaciados en el tiempo.
Cambios en la edad de jubilación
En cuanto a la edad de jubilación, se producirán algunos cambios importantes en los próximos años. A partir de 2025, será necesario haber cotizado al menos 38 años y tres meses para poder jubilarse a los 65 años. Aquellos que no alcancen ese periodo de cotización deberán esperar hasta los 66 años y 8 meses para jubilarse. Para 2027, quienes hayan cotizado menos de 38 años y seis meses tendrán que esperar hasta los 67 años.
En 2025, tenemos subida de las pensiones, una vez más. Con todas estas reformas no solo se consigue mejorar la situación económica de los pensionistas más vulnerables, sino también asegurar que las pensiones sigan siendo posibles en el futuro.