Estudiar unas oposiciones y optar por los empleos públicos son una salida laboral que muchos se han planteado alguna vez en su vida y que otros tantos han decidido lograr a pesar de todos los sacrificios y esfuerzos que deben hacer para conseguirlo. Y es que la posibilidad de contar con una estabilidad, unos horarios regulados y un sueldo que se revaloriza todos los años hacen que todo eso valga la pena, a pesar de que el camino sea duro, largo y, a veces, se necesiten varios intentos para llegar a la meta.
Pero toda esta idea que tenemos de las oposiciones podría cambiar, ya que hay unas cuantas que cuentan con poco temario, hay muchas plazas que cubrir y que ofrecen unas perspectivas laborales muy buenas en España, aunque es cierto que esto depende en gran parte del sector y de la formación que tengas. Así que veamos en este artículo cuáles son las que cuentan con un volumen de contenidos muy manejable y cuya frecuencia de convocatoria es mucho más alta que en otras.
Opciones de oposiciones: administración, sanidad y justicia
Algunas de las opciones más accesibles son las de Auxiliares y Administrativos del Estado, ya que la primera categoría de estas solo requiere ESO o FP1 y se examina mediante un único ejercicio que abarca aproximadamente 28 temas; mientras que, por su parte, los Administrativos del Estado exigen Bachillerato o FP de Grado Medio, con un temario que ronda los 45 temas y un examen único similar. Algunas de las cosas más interesantes que tienen, es que se convocan con bastante regularidad, además de que las condiciones laborales son muy estables y cuentan con perspectivas de promoción interna.
Si nos vamos al sector sanitario, unas de las oposiciones que más destacan por la facilidad y rapidez de incorporación son las celador, ya que para acceder a ellas solo se necesitan estudios básicos y cuentan con 17 temas que estudiar de cara al examen, el cual se realiza en formato tipo test.
Por otro lado tenemos que, en el ámbito de la Justicia, está Auxilio Judicial, el cual permite que te presentes con la ESO y el examen consta de dos pruebas de tipo test que versan sobre un temario de tan solo 25 temas. También está Tramitación Procesal, que este ya sube un poquito más el nivel, ya que exige Bachillerato y tres ejercicios eliminatorios, aunque el formato tipo test facilita la preparación de los exámenes.
Cómo poder sacarse una oposición
El denominador común de estas oposiciones con menos temario y más plazas es la planificación, y es que debemos tener muy claro el calendario de convocatorias, organizarnos bien los bloques de estudio y reforzar los ejercicios tipo test practicándolos, lo cual permite optimizar esfuerzos y reducir la ansiedad, denominador común para los que se enfrentan a este tipo de pruebas. También puede ser adecuado apuntarse a uno de los numerosos cursos que existen y que te ayudan a prepararte, gracias a los cuales podrás prepararte siguiendo sus programas, sobre todo si ya has perdido la costumbre de estudiar por tu cuenta.
En definitiva, no todas las oposiciones requieren años de preparación o temarios interminables, ya que tal y como hemos visto en este artículo, Administrativos, Auxilio Judicial, Tramitación Procesal o celadores ofrecen oportunidades que son muy alcanzables, con buena cantidad de plazas, temarios manejables y un acceso relativamente rápido a un empleo estable, por lo que para quienes buscan seguridad y condiciones laborales claras, estas alternativas se presentan como la mejor combinación entre esfuerzo, tiempo y resultado.