Hay buenas noticias para un sector de la población que realmente merece oírlas. Esta ayuda está directamente destinada a esas personas que, por diversos motivos, conviven con personas mayores de 65 años, generalmente los padres.
Se trata de un beneficio fiscal de hasta 1.150 euros. El beneficio no es un regalo directo, sino una deducción que se aplica a través de la Declaración de la Renta, lo que permite a las familias reducir esa carga fiscal de manera bastante generosa.
Regalo de 1.150 euros de Hacienda
El concepto detrás de este beneficio es sencillo pero, cuanto menos, poderoso: reconocer el esfuerzo y los precios adicionales que conlleva cuidar a un miembro de la familia que ha alcanzado la tercera edad. En muchas culturas, el cuidado de los ancianos es una responsabilidad que se asume con orgullo, pero no se puede negar que también implica una carga económica.
Así es como Hacienda busca aliviar parte de esa carga, incentivando a las familias a mantener a sus mayores en casa, dándoles los cuidados necesarios en un entorno amoroso y familiar. Un entorno digno de sentirse en casa.
Para acceder a este beneficio, hay un requisito clave que las familias deben cumplir: la persona mayor de 65 años debe convivir de manera habitual con la unidad familiar. No basta con visitas ocasionales o ir a “llenar el tupper”; debe haber una convivencia permanente que justifique la deducción
Además, la persona mayor debe depender económicamente de la familia, lo que significa que no debe tener ingresos propios para mantenerse de forma independiente. En otras palabras, la persona mayor debe ser dependiente de la unidad familiar.
Una ayuda bien merecida que se desgrava en la Renta
Este beneficio de 1.150 euros por cada persona mayor de 65 años conviviente se desgravará directamente en la Declaración de la Renta, lo que significa que se reducirá la cantidad de impuestos que la familia debe pagar. En muchos casos, esta deducción puede marcar la diferencia entre tener que pagar una cantidad significativa de impuestos o recibir un reembolso. Para las familias que cuidan de más de un ascendiente, el impacto económico puede ser aún mayor.
Además de la ventaja económica, este beneficio también tiene un componente social: se fomenta un entorno donde los ancianos pueden mantenerse en contacto cercano con sus seres queridos, lo que puede mejorar su calidad de vida y bienestar psicológico. Y es que todos sabemos que como en casa, en ningún sitio. Para muchas personas mayores, la posibilidad de vivir con sus hijos o nietos, en lugar de en una residencia o en soledad, es invaluable.
Es importante que las familias que cumplen con estos requisitos estén bien informadas y preparadas para aprovechar este beneficio en su próxima Declaración de la Renta. No solo es necesario asegurarse de que la convivencia esté bien documentada, sino también de que toda la información fiscal esté correctamente presentada.
Es una forma de reconocer y apoyar a las familias que cuidan de sus mayores, ofreciéndoles un alivio fiscal significativo. Si convives con una persona mayor de 65 años que depende económicamente de ti, asegúrate de reclamar esta deducción en tu próxima declaración. No solo estarás aprovechando un beneficio económico, sino que también estarás contribuyendo a una mejor calidad de vida para aquellos que te cuidaron a ti en su momento.