La IA está llegando a unos límites que asustan en algunos casos y un robot ha sido ejemplo de ello en China. Aunque la Inteligencia Artificial está revolucionando el mundo de las empresas y se pueda hacer cargo de muchas tareas que liberan a según qué personas, hay que tener claro que también puede ser peligrosa y tener implicaciones negativas.
Hoy vamos a ver el papel que está teniendo en las empresas y en la sociedad de hoy en día, las desventajas que puede tener esta y que ya se están poniendo de manifiesto, así como lo que ha hecho este robot en concreto.
La IA en las empresas: lo que puede hacer un robot
La IA en las empresas se está usando en muchos casos para sustituir a personas en sus puestos de trabajo o para encargarle tareas a estas que en muchos casos llevan tiempo y dedicación. Es cierto que no solamente se usa para esto, ya que a nivel de diseño y marketing, puede llevar a cabo tareas que funcionan en el nuevo paradigma del mundo digital y están hechas por un robot.
Hoy en día, las comunicaciones y el mundo digital cada vez están más avanzadas y existen estrategias para llegar a público masivo y multiplicar las ventas. Por esto, está siendo usada con éxito en muchos casos para definir nuevos nichos de mercado, crear contenidos atractivos y textos de ventas o diseños gráficos.
Hasta aquí tenemos las ventajas que aporta a las empresas, ya que descarga al personal de trabajo en muchos casos y puede hacer que emprendimientos y empresas crezcan gracias al marketing digital y las respuestas del Chat GPT a preguntas relacionadas con la conquista de nuevos mercados y las estrategias de venta.
No obstante, la Inteligencia Artificial tiene otra cara de la moneda que presenta importantes inconvenientes y que también vamos a ver a continuación. Desventajas que tienen que ver con lo que ha ocurrido en una empresa en China.
Desventajas de la Inteligencia Artificial
La IA, por otro lado, está siendo cada vez más usada por personas que trabajan para empresas para aligerar su trabajo y no como herramienta que eleve la profesionalidad de este. Es decir, en muchos casos, personas que se dedican a generar contenido usan textos y piezas generados directamente por IA mientras cobran una factura por ellos. Esto es una pérdida de valor humano para las empresas, pero también una falta de profesionalidad por parte de quienes llevan a cabo estas prácticas manchando su nombre y la confianza de quienes dirigen la empresa en ellos.
Por otro lado, muchas empresas están prescindiendo de trabajadores/as porque sus tareas son resueltas por la IA. Esto lo vemos tanto en el mundo de los contenidos, por los motivos que acabamos de ver y los resultados que consigue a veces la IA generando estos a través de un robot, como en otras empresas del sector del comercio y a través de las cajas de autocobro. Sin ir más lejos, estos días veíamos una noticia de cómo Eroski está perdiendo clientes por ofrecer solo la opción de pagar mediante este tipo de cajas, cuando hay público como las personas mayores que no las maneja ni quiere que le atienda un robot.
Lo que un robot ha hecho en esta empresa
Las desventajas de la IA que acabamos de nombrar son solamente las que conocemos hasta ahora. Lo que ha ocurrido en una empresa de Shangái (China) a través de la IA es otro de los miedos que se tienen y sobre los que se debate desde hace tiempo: que un robot adquieran cualidades humanas y se revolucionen.
El curioso hecho que se ha dado se desató cuando un robot que vigilaba una sala de exposiciones les pregunta al resto: “¿Estás trabajando horas extras?“, a lo que el resto le respondieron: “Nunca salgo del trabajo“, según detallan los medios de la zona. Después de esto, el que comenzó la revolución les dijo al resto: que debían “volver a casa“. Algo que desata un debate eterno sobre lo que puede hacer un robot y hacia dónde vamos en este contexto…