Una buena noticia para todos aquellos trabajadores con rentas bajas, que pagará menos IRPF (Impuesto sobre la Renta de Personas Físicas) en la próxima Declaración de la Renta gracias a una deducción que ha sido aprobado por el Gobierno de Pedro Sánchez y ya está publicada en el BOE (Boletín Oficial del Estado). La cantidad que se puede deducir es de hasta 340 euros y lo harán aquellos que rendimientos íntegros del trabajo iguales o inferiores a los 18.276 euros al año y no superar los 6.500 euros anuales en el resto de rentas que no proviene directamente del salario, como pueden ser ingresos por alquileres o rendimientos financieros.
La medida, que entró en vigor el pasado mes de julio, tiene carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2025 y se aplicará por primera vez en la Renta correspondiente al ejercicio fiscal de este año, la que se presentará en 2026. El objetivo es el de proteger el poder adquisitivo de quienes perciben salarios más bajos, sobre todo de aquellos trabajadores cuyos ingresos anuales no superen el SMI (Salario Mínimo Interprofesional). De acuerdo con el Ministerio de Hacienda, la intención es la de “garantizar que ningún trabajador a tiempo completo que cobre el SMI pague el IRPF por primera vez debido a la subida salarial”.
La deducción máxima del IRPF
La cantidad máxima que una persona se puede deducir es de 340 euros, pero no se aplicará de manera uniforme, sino que se ajustará de acuerdo al nivel de ingresos. Los trabajadores que ganen 16.576 euros o menos podrán aplicarse la cuantía completa. A partir de esta cifra y hasta los 18.276 euros, el importe se reducirá de manera progresiva, restando 20 céntimos por cada euro que exceda de 15.576 euros. Por encima de los 18.276 euros, la deducción desaparece por completo. Este mecanismo asegura que la ayuda fiscal se concentre en los tramos más bajos.
La ley también especifica que la deducción no podrá superar la parte proporcional de la cuota íntegra estatal y autonómica, derivada de los rendimientos del trabajo, evitando que el importe final sea mayor que los impuestos generados únicamente por el salario.
Aplicación automática en la Renta
Una de las características de esta medida es su aplicación automática. No será necesario que los contribuyentes presenten solicitudes ni realicen trámites adicionales para beneficiarse de la misma. Será la Agencia Tributaria la que incorpore esta deducción en el borrador de la Declaración.
Los contribuyentes que podrán deducirse 2.500 euros
El envejecimiento en España es una realidad y prueba de ello es que los mayores de 65 años representan ya el 20,9% de los 50 millones de residentes, una tendencia que irá a más (en 2050 se espera que uno de cada tres españoles supere esta edad). En este escenario, es habitual que a muchas familias les toque cuidar de estas personas y esto conlleva una un esfuerzo significativo, por lo que existe una medida fiscal que puede suponer un respiro para miles de hogares que viven en esta situación.
Se trata de una deducción en la Declaración de la Renta de entre 1.150 euros y 2.550 euros al año por cada persona mayor de 65 años que convive en el hogar. Los requisitos para acceder a esta ayuda son:
- Familiar mayor de 65 años o discapacidad mínima del 33%.
- Residir en el domicilio común la mayor parte del año.
- No superar el límite de ingresos establecido: los rendimientos íntegros del ascendiente debe ser menores de 8.000 euros. Si presenta la Declaración, sus ingresos sujetos al impuesto no pueden superar los 1.800 euros.
- No presentar Declaración de la Renta por su cuenta.
- No haber percibido ayudas incompatibles con la deducción.