Es habitual ver informaciones sobre paraísos fiscales en los que determinados personajes públicos tienen depositado su dinero. Por desgracia, durante un tiempo, era una noticia del día a día en la actualidad de nuestro país, sobre todo en la política. Cuando se habla de paraísos fiscales, se hace de territorios que no colaboran con otros gobiernos en cuestiones fiscales. Algunos de ellos han sido incluidos en la lista negra de la Unión Europea (UE) y eso les conlleva graves consecuencias: mala reputación internacional, sanciones financieras y una mayor supervisión.
Los 11 países que están en la lista negra de la UE
Teniendo en cuenta la última actualización, hay 11 países y territorios que forman parte de lista negra de paraísos fiscales de la Unión Europea. La misma está formada por Samoa Americana, Anguila, Fiyi, Guam, Palaos, Panamá, Rusia, Samoa, Trinidad y Tobago, Islas Vírgenes de Estados Unidos y Vanuatu.
¿Por qué está incluidos en la lista negra de la UE?
Desde el gobierno del viejo continente se tomó la decisión de incluir a estos países y territorios en la lista de paraísos fiscales debido a su falta de cooperación o por no implementar las reformas fiscales necesarias para cumplir con los estándares internacionales de transparencia y justicia fiscal. La evaluación de las jurisdicciones por parte de la UE se basa en los siguientes criterios:
- Transparencia fiscal. Se analiza si el país intercambia información fiscal con los gobiernos de manera efectiva y se ajusta a los estándares internacionales de transparencia.
- Justicia fiscal. Se verifica si la jurisdicción aplica regímenes fiscales perjudiciales o que faciliten la evasión de impuestos.
- Implementación de medida contra la erosión de la base imponible y el traslado de beneficios (BEPS). Así, se evalúa si se han adoptado medidas que ayuden a prevenir prácticas fiscales abusivas que dañen la base imponible de otros países.
¿Cuáles son las consecuencias de estar en la lista negra?
Si un país es incluido en la lista negra de la Unión Europea, las consecuencias para estos son varias:
- Reputación internacional. Si un país es considerado como paraíso fiscal por parte de la UE, en este caso, su imagen saldrá perjudicada y esto dificultará la atracción de inversiones legítimas.
- Sanciones financieras. Los países comunitarios puede aplicar medidas como la imposición de retenciones fiscales más altas, restricciones de acceso a financiación o exclusión de los fondos europeos.
- Mayor supervisión. Las transacciones financieras y comerciales con entidades de países en la lista negra suelen estar sujetas a un control más riguroso por parte de las autoridades fiscales e instituciones financieras.
¿Cada cuánto y cómo se actualiza la lista negra?
La lista negra de paraísos fiscales de la UE se actualiza y revisa cada seis meses y durante este periodo se analiza el progreso de las jurisdicciones en cuestión y se decide si siguen o no en el listado. Así, en 2024, Antigua y Barbuda fue sacada de la lista después de llevar a cabo reformas fiscales que estaban dentro de los requisitos exigidos por nuestros dirigentes continentales.
La lista negra de paraísos fiscales que elabora la UE es una herramienta creada con el objetivo de fomentar la cooperación fiscal y luchar contra la evasión y elusión de impuestos, tanto a nivel europeo como global. No obstante, su eficacia y alcance siguen siendo objetos de intensos debates políticos. A pesar de todo, es crucial que la UE continúe colaborando con las jurisdicciones afectadas y con otras organizaciones de carácter internacional para asegurar unas políticas fiscales, a nivel mundial, sean justas, transparentes y beneficien a todas las partes.