Queda muy poco para que las balizas V16 conectadas sean una obligación y esto ha hecho que aparezcan las dudas de última hora, sobre todo en lo que tiene que ver con la privacidad de los datos que aportan. Ante la avalancha de mensajes que circulan en redes sociales y en otros foros, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) decidió manifestarse y aclarar la información que emite realmente el dispositivo y los límites que marca la norma. Así, recordó que no es una herramienta vinculada a una matrícula o persona y que sólo sirve para mejorar la visibilidad del vehículo inmovilizado y comunicar su posición para tener una respuesta más inmediata ante un accidente.
No se asocia a nada
Desde la AEPD se recuerda que las V16 conectadas deberán emitir una luz visible y enviar un aviso automático de tráfico cuando se activan. Este aviso sirve para comunicar la ubicación exacta del vehículo detenido, pero se informa que el dispositivo cuenta únicamente con un identificador técnico que no está vinculado al número de matrícula ni a la persona propietaria del coche. Además, hace especial énfasis, en que durante el momento de compra no se debe facilitar ningún dato persona a ninguna administración y que mientras que la herramienta está apagada no se transmite ninguna información.
En el caso de activarse por una emergencia, la señal que envía solo refleja la localización del incidente durante el tiempo en que está funcionando. No permite conocer quién conduce ni reconstruir trayectos anteriores, ya que no genera historiales de movimiento ni transmite datos de forma continua.
Señalizar, otro uso está prohibido
La normativa de la Dirección General de Tráfico (DGT) dice que la única misión de la V16 conectada es mejorar la visibilidad del vehículo inmovilizado y comunicar su posición para tener una respuesta más rápida ante un accidente. La AEPD recuerda que cualquier otra función adicional está fuera de la ley, eliminando así el temor a posibles usos secundarios o invasivos.
Correos, otro punto de compra de las balizas
Ante la inminente llegada de las balizas en sustitución de los triángulos de emergencia en nuestro país, Correos facilita la transición ofreciendo los nuevos dispositivos con las características homologadas que exige la DGT.
El coste de las balizas V16 conectadas con la DGT 3.0 que se pueden adquirir en las oficinas de correos, que ofrece tres opciones diferentes en su catálogo, oscila entre los 41,95 euros en su rango más económico, el intermedio está 48,94 euros y el más caro tiene un precio de 59,50 euros. Los tres modelos disponibles en correos incluyen el plan de datos necesario para conectar con la nube de la DGT 3.0 hasta el año 2038 o 2039, según el fabricante, sin costes extra para el usuario.
Al igual que en otros puntos de venta, la demanda es alta porque el 1 de enero está a la vuelta de la esquina y no contar con una baliza conlleva sanción a partir de ese mismo día.
¿Por qué una baliza geolocalizable?
El principal beneficio de estos dispositivos es la seguridad física del conductor. A diferencia de lo que ocurre con los triángulos, aquí no hace falta bajar del vehículo ni pisar la calzada. Basta con bajar la ventanilla, adherir la base imantada al techo y activar la luz.
Tal y como asegura Correos, estas balizas aportan ventajas claras:
- Conexión inmediata, ya que al encenderse envían la ubicación exacta a los servicios de emergencia y tráfico.
- Visibilidad puesto que sus luces LED se ven a un kilómetro de distancia en 360 grados.
- Autonomía, pues funcionan con pilas o batería y garantiza conexión por más de una década.