Los días son más cortos y el frío, en gran parte del país, ha hecho acto de presencia. Esto, en cuanto a la conducción, conlleva que hay prestar más atención. Por ello, desde la Dirección General de Tráfico (DGT) se ha lanzado un nuevo aviso: no basta con dejar el modo automático de las luces encendido, porque si los sensores no detectan bien la baja visibilidad el vehículo puede circular sin alumbrado y exponerse a sanciones que van desde los 200 euros a los 600 euros.
Si nos atenemos a la normativa, la misma obliga a llevar el alumbrado adecuado entre la puesta y la salida del sol y siempre que existan condiciones meteorológicas adversas. El problema con el modo automático es que los sensores no siempre identifican a tiempo la lluvia, niebla o la entrada a un túnel, dejando el coche poco visible para el resto.
Por ello, desde el organismo de Tráfico se recuerda que “ver y ser visto” es una condición básica y circular sin luces puede suponer un castigo de 200 euros por infracción grave y de 600 euros cuando se pone en riesgo la seguridad del tráfico. A esto hay que añadir que, en caso de accidente, el seguro podría no cubrir si se demuestra negligencia en el uso del alumbrado.
Las diferentes situaciones, la norma y las consecuencias
En resumen, esto es lo que hay que hacer y las consecuencias de no hacerlo en cada situación:
- Entre la puesta y la salida de sol hay que encender el alumbrado correspondiente. No hacerlo conlleva multas de 200 a 600 euros.
- Cuando hay lluvia o niebla con baja intensidad se deben usar las luces adecuadas para ser visible. De no hacerlo, multa entre 200 y 600 euros.
- En los túneles o tramos con poca luz se deben activar, al menos, las luces de cruce ya que de no hacerlo la sanción también estaría entre los 200 y 600 euros.
- En caso de siniestro por negligencia en alumbrado se debe poner mayor atención y un uso correcto de las luces. De no hacerlo, el seguro podría no cubrir los gastos.
Por resumir, que el modo automático ayuda, pero no sustituye la responsabilidad del conductor, por lo que se recomienda no confiar todo a un sensor.
Cómo y cuándo activar de forma manual el alumbrado en invierno, sobre todo si hay lluvia
Aunque los dispositivos automáticos son cada vez más avanzados, no reemplazan la atención del conductor. En atardeceres, con el sol de frente, los sensores pueden creer que hay luz suficiente y no activar, por tanto, las luces de cruce ni las de atrás. Por tanto, antes de iniciar la marcha, sobre todo en los meses de frío, conviene verificar de forma manual qué luces de cruce y de atrás funcionen y que se encienden en el momento en el que se activen.
Si la visibilidad cambia de manera repentina, por lluvia intensa, niebla o zonas sombrías, habrá que activar el mismo alumbrado sin esperar a que lo haga el sistema. Así evitamos sustos y sanciones.
El artículo 43 de Ley de Seguridad Vial
De acuerdo con el artículo 43 de la Ley de Seguridad Vial, entre la puesta y la salida de sol, y en condicione adversas, el vehículo tiene que llevar encendido el alumbrado correspondiente, con independencia del sistema empleado. Por tanto, da igual si el coche tiene sensores o no, pues la obligación recae en la persona que conduce.
Además de las luces, necesario tener otros aspectos en cuenta como reducir la velocidad, mantener una distancia de seguridad mayor, evitar adelantamientos que no sean seguros y conducir con suavidad, así como revisar neumáticos, frenos y limpiaparabrisas.